El Lago

La visita de Cosme III al palacio y los jardines del Buen Retiro estuvo también amenizada por un paseo en barca a través del gran estanque y los canales con que los ingenieros a las órdenes del Conde-Duque habían convertido el árido paraje original en un delicioso vergel.

Así describe Magalotti la pequeña travesía: “Su Alteza fue conducido de paseo por todos los canales en dos lindísimas embarcaciones; un bergantín todo él dorado, con toldo y gallardetes de brocado de oro y verde y una barraca (así la llaman) también toda ella de talla y oro y cubierta de brocado y plata y encarnado; estas embarcaciones son las que conducen a las personas reales cuando quieren divertirse por el mencionado estanque.”